Si no sabes recargar tu teléfono celular, mucho menos un auto eléctrico
¡Confiésalo! Apenas ves que el nivel de carga en tu teléfono celular está por debajo de 90% corres a conectarlo en el toma corriente más cercano o lo conectas en cuanto entras al auto.
Si estás en este grupo, debes saber que ese alivio instantáneo que te provoca ver subir el nivel de carga en la batería cuando conectas tu teléfono, tiene un efecto que a la larga, acelera la muerte de la batería.
Esto se debe a que las baterías de los dispositivos eléctricos modernos, que en su mayoría son de iones de litio), no son como un vaso de agua o el tanque de gasolina de tu auto, que se puede rellenar cuando está medio lleno o medio vacío.
El proceso de carga/descarga se completa tras una serie de reacciones químicas provocadas por la electricidad: cuando la batería se está recargando, los iones de litio fluyen del electrodo positivo al negativo y luego del negativo al positivo, mientras usa su teléfono. En ambos casos se genera calor, por lo que también es necesario aprender a controlar el periodo de uso de los dispositivos.
Todo esto se puede ver afectado por otros factores como la capacidad del toma corriente al que se conecta el dispositivo, y sobre todo por el contacto constante con un toma corriente.
Para aprovechar al máximo la vida útil de una batería, que está predeterminada en el momento de su fabricación entre 300 y 2,500 ciclos de carga/descarga, la teoría científica dice que sólo debía cargarse cuando estaba completamente vacía, aunque la realidad es que no es práctico ni seguro para la batería, dejarla caer al 0%, porque eso implicaría no poder usar el dispositivo, además de afectar su composición química.
Según las recomendaciones de los fabricantes y los expertos en la materia, la mejor práctica para preservar la salud de una batería, ya sea de un teléfono o de un auto, es enchufarla cuando está alrededor del 20% y cargarla hasta el 80-90%.
Esto es especialmente importante si utilizas la carga rápida, como el toma corriente de la casa en el caso de un teléfono celular y en las estaciones de recarga pública de Nivel 3 cuando se trata de los autos, ya que cargar desde el 0% generará mucho calor, y a partir del 80%, la carga rápida se vuelve menos eficiente.
Para los dispositivos móviles – teléfonos celulares, tabletas, relojes inteligentes, etc. -, también existen diferentes tipos de cargadores además del toma corriente regular, incluyendo las plataformas de recarga por inducción (sin cables), que se venden como accesorios y están en algunos autos, pero no son tan rápidos.
¿Cuánto tiempo lleva cargar un auto eléctrico?
La batería de los autos eléctricos se puede recargar en tres tipos de cargadores, por lo que la respuesta corta y correcta, siempre es: “depende”.
El cargador portátil de Nivel 1 es el que viene con la mayoría de los vehículos eléctricos y se conecta a un toma corriente de pared normal de 110V, con el que la recarga de la batería puede tardar hasta 2 o tres días, lo cual no es práctico para nadie.
El cargador de Nivel 2, que muchos propietarios de vehículos eléctricos optan por instalar en su casa ya que permite cargar la batería al 100% en unas 8 horas – por lo general de noche -, se conecta a un circuito de 220 V, similar al de la secadora de ropa o las estufas eléctricas.
Los cargadores rápidos de Nivel 3 (CC) son los que están instalados en las estaciones de recarga pública y pueden recargar la batería de un auto eléctrico del 10 al 80% en menos de 20 minutos, siempre y cuando el vehículo tenga la capacidad para aceptar la capacidad rápida.
Tras esta breve explicación sobre los procesos de carga/descarga, es obvio que hay todavía mucho que aprender para usar adecuadamente los teléfonos celulares y especialmente los autos eléctricos.
Sobre todo, tomando en cuenta que el Motorola DynaTAC 8000X fue primer teléfono móvil celular de mano disponible comercialmente tras su debut en 1983, cuando la carga de su batería era relativamente corta en comparación con la de los teléfonos móviles modernos, con un tiempo de conversación de unos 30 minutos y unas 8 horas en total.
Más de 40 años más tarde, casi nadie ha aprendido a recargar un teléfono celular moderno.
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